La migración internacional se verá afectada por el futuro del trabajo, como lo demuestran tres ejemplos. En primer lugar, el desarrollo de los países reduce, en general, el número de trabajadores agrícolas necesario para producir los alimentos que se consumen. En respuesta a esta tendencia, muchos de esos trabajadores que quedan sin empleo se trasladan de las zonas rurales a las urbanas. El segundo ejemplo se refiere al crecimiento de las grandes corporaciones mundiales con sus propias fuerzas de trabajo multinacionales. Estas empresas trasladan a su personal entre los países en que operan, pero también establecen fábricas en muchos lugares del mundo, ofreciendo nuevas oportunidades de empleo en países de menores ingresos. El tercer ejemplo se relaciona con la importancia de la tecnología de la información, especialmente la inteligencia artificial, como impulsora de la productividad. Aún no sabemos si la inteligencia artificial y la robótica desplazarán a los trabajadores, reduciendo la necesidad de migrantes, o si crearán nuevos nichos económicos con una creciente demanda de trabajadores. Pero, en cualquier caso, está claro que tendrá un efecto en el futuro del trabajo.
Futuro del trabajo y agricultura: la migración como estrategia de adaptación
En 2018, alrededor del 26,5% de los trabajadores del mundo estaban empleados en la agricultura, frente a un 43,2% en 1991 (OIT, 2020). Sin embargo, en los países de ingresos bajos, en que la agricultura mecanizada está menos difundida, el 65,2% de los trabajadores varones y el 69,8% de las trabajadoras aún están empleados en la agricultura (Banco Mundial, 2019). En contraste, en los países de ingresos altos este sector absorbe solo el 3,2% de la fuerza de trabajo masculina y el 2,0% de la femenina (Banco Mundial, 2019). Los agricultores de los países de ingresos bajos tienen por lo general ingresos inferiores a la media y, en muchos casos, cultivan poco más que lo que necesitan para la alimentación del hogar, recurriendo a la migración interna a las zonas urbanas o a la migración internacional para mantener a sus familias, especialmente en casos de sequía persistente o recurrente (véase Desarrollo rural, migración interna y resiliencia). Cuando migran, los exagricultores de todas partes del mundo tienen altas probabilidades de aceptar los empleos ingratos, peligrosos y difíciles que los locales son menos propensos a realizar, tanto en el caso de la migración de una zona rural a una urbana como en el de la migración internacional.
Futuro del trabajo y cooperación multinacional: implicaciones para los trabajadores migrantes poco calificados
La globalización del mercado laboral, a medida que las empresas multinacionales planifican cada vez más sus fuerzas de trabajo en términos mundiales y no ya nacionales, influye en la migración actual y seguirá haciéndolo en el futuro. Otro factor que influye es la tasa sin precedentes de uso de mano de obra contingente y de la subcontratación externa por parte de esas empresas. En la manufactura, es común que los componentes de un mismo producto se hayan fabricado en varios países diferentes, por conducto de filiales de la misma empresa o de contratistas. El interés de las empresas en desplazar a sus trabajadores para atender las exigencias de este tipo de programación entre sus filiales y contratistas entra frecuentemente en conflicto con las políticas de inmigración.
Muchos gobiernos no ponen problemas a que las empresas trasladen a sus ejecutivos, directores, profesionales y personal con conocimientos especializados en sus prácticas laborales a puestos situados en distintas partes del mundo, independientemente de la nacionalidad. Pero la movilidad internacional del personal menos calificado, a menudo para trabajar en los contratos adjudicados a esas empresas, es más controvertida. Ya sea que esos traslados tengan que ver con la creación de infraestructura en países menos desarrollados, que las empresas compitan por contratos en otros países de ingresos más altos, o que los subcontratistas soliciten visados de trabajo para programadores informáticos y otros especialistas, hay cuestionamientos con respecto al significado del comercio leal y la posible competencia de los trabajadores extranjeros con la fuerza de trabajo nacional.
Futuro del trabajo e inteligencia artificial: retos y oportunidades para los trabajadores migrantes
La tecnología de la información en general, y la inteligencia artificial más en particular, también cambiarán el futuro del trabajo y tienen repercusiones en la migración. “El desarrollo de la automatización que están trayendo consigo las tecnologías, como la robótica y la inteligencia artificial, encierra promesas de mayor productividad, eficiencia, seguridad y comodidad, pero también suscita preguntas complejas en relación con las consecuencias más amplias de la automatización en los empleos, las competencias, los sueldos y la naturaleza misma del trabajo” (McKinsey Global Institute, 2017).